Un esclavo entrenado para convertirse en gladiador inicia una rebelión que atraviesa el imperio romano, formando un creciente ejército de esclavos que intenta llegar al sur del país para escapar de Roma y lograr la libertad. Mientras tanto, en la capital, la revuelta se convierte en el factor que puede definir de una vez por todas una disputa por el poder entre dos facciones del senado.