Inspirado por las películas de terror de su infancia y tratando de abrirse camino en la industria, Kevin Williamson comenzó a trabajar en un guión que genéricamente bautizó como "Scary Movie", una historia sobre un asesino enmascarado que le gustaría ver pero que sentía que nadie estaba haciendo en ese momento.
Renovando de alguna forma el género del slasher pero manteniendo referencias constantes a los clásicos, Williamson logró vender su idea (que ya tenía notas para una franquicia con al menos dos secuelas) a Miramax. Cuando el estudio sumó a Wes Craven como director, el equilibrio entre lo clásico y lo moderno se consolidó en un primer film que fue rebautizado como Scream, logrando un éxito comercial y de crítica que inició una nueva etapa del cine de terror juvenil y inició una franquicia que continuó en numerosas secuelas y en otros medios, instalando a Ghostface como un icono moderno entre los asesinos enmascarados del cine.
19962023