película • Francia y Italia ()
En un barrio moderno y anodino, donde todo está excesivamente organizado, viven monsieur Arpel, su esposa y su hijo Gérard, que se aburre soberanamente. La llegada de su tío, monsieur Hulot, un personaje soñador y lleno de fantasía, alterará las vidas de todos. Ver detalles
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El humor de Jacques Tati: mecanismos de la risa
(Soy nuevo en el foro y tal vez mi extrema ancianidad me ha impedido encontrar aquí alguna sección en donde explayarse en forma temática por la obra completa de un autor. He tomado a Mon Oncle como vehículo para expresar mi gran admiración por el extraordinario maestro Jacques Tati. Me disculpo de antemano y si los Administradores consideran que esto no debe ir aquí, agradezco lo eliminen, porque tampoco pude averiguar la forma de borrar algo ya publicado).
Hay muchas formas para reírse en el cine, tantas como eventuales espectadores hayan. Algunos entienden por risa a la mueca de agrado o el brillito de ojos provocados por la sonrisa. Para otros la risa es sinónimo de carcajada. A medio camino entre ambas posturas puede ubicarse el humor de la ternura, a veces delirante, otras reflexivo y casi siempre apelando a la sensibilidad y decodificación de un espectador atento. Este es el humor de Jacques Tati.
En todas sus películas él interpreta un personaje (con excepción de la primera) llamado Monsieur Hulot que es un tipo absolutamente desenganchado de la realidad y de las convenciones, que no entiende la tecnología, que es muy dulce, siempre viste una gabardina, pantalones que le quedan cortos, una pipa sin encender, un pequeño sombrero tirolés y que no pronuncia palabra alguna. A veces hace algo así como un murmullo que es incomprensible. Y aquí se encuentra otro de los elementos de su humor: la importancia de la banda sonora. En general los diálogos son escasos y están usados como efecto sonoro que se suman a todo el sonido ambiente que pasa a tener una particular importancia (los ruidos que se provocan en un sillón cuando alguien se sienta o se levanta del mismo son especialmente amplificados por ejemplo, o el chirrido de puertas, ladridos de perros en la lejanía, murmullos inteligibles que suplantan a la mayoría de los diálogos) como si fueran un personaje más. Es un humor esencialmente visual, sugerente y engañoso de la realidad pero, a la vez, con un uso portentoso de la banda sonora.
De origen ruso (Jaques Tatischief) desde jovencito trabajó como mimo y en su paso al celuloide creó al entrañable Monsieur Hulot. El paso por la vida de este personaje es un perpetuo enfrentamiento con la tecnología y los tiempos modernos. Su obra es una crítica feroz a las apariencias, a la automatización desenfrenada y a todas las convenciones sociales que reniegan de la naturaleza, de la sencillez y, fundamentalmente, de las personas comunes y corrientes del pueblo.
En la obra de este genial francés la parte visual es una verdadera coreografía humana en la que la acción principal transcurre en primer plano, pero en el fondo ocurren multitud de otras cosas siempre muy graciosas y que implican un trabajo de puesta en escena y ensayo abrumadores. Porque todo lo que pasa atrás en segundo y tercer planos, así sea una multitud de extras o extraños decorados, tienen un significado. Ello explica las razones por las cuales afirmo que a las películas de Tati (especialmente Playtime) cada vez que se las vuelven a ver se les encuentran elementos nuevos. Asimismo, el espectador que disfrute su obra en casa recurre frecuentemente al rebobinado del disco para apreciar geniales sutilezas que, por su abrumadora sumatoria, en un primer visionado pasan desapercibidas.
Respecto a lo anterior y para que se tenga una idea, yo he visto más de 9 o 10 veces cada una de las películas y hace un mes volví a ver Trafic (1971 - Monsieur Hulot al Volante), en ella hay una escena en que el personaje se queda sin nafta en la carretera y emprende un viaje a pie con un bidón en búsqueda del combustible. Y camina, camina, camina, se interna en el campo alejándose de la carretera y sigue caminando en lo que yo siempre había tomado como un chiste del pobre diablo caminando con un bidón en medio de la nada; hasta que me di cuenta que mientras él va a campo traviesa en el fondo, en un lejanísimo plano se ve la carretera transitada por…. camiones cisternas de combustible. Bueno, este elemento que es un muy inteligente y sutil chiste yo nunca lo había apreciado antes.
Y qué decir de Tati y la geometría. En París, en la facultad de arquitectura, se estudian especialmente Mon Oncle y Playtime porque casi todos los planos están diseñados para que la cámara los capte con un singular sentido del espacio, de la simetría, de la asimetría y las líneas. Si se hace una búsqueda en Internet acerca de “Tati y la Geometría” aparecerá cuantioso material al respecto.
Uno podría creer que Tati, al igual que su personaje Monsieur Hulot, es un tipo que reniega de la modernidad y sin embargo es todo lo contrario. Este gran director tuvo la audacia de innovar en todos sus filmes con las últimas y más arriesgadas técnicas cinematográficas que se inventaban en el momento de su rodaje. Su primer largometraje Jour de Fête de 1949 (único en el que ya aparece su personaje, personificando a un cartero, pero que aún no ha recibido el nombre de Monsieur Hulot) fue filmado simultáneamente con dos cámaras y una de ella utilizó una técnica de fotografía en color experimental francesa que pretendía competir con Pathé y que con el tiempo, no prosperó (yo tuve grandes dificultades para conseguir una versión en francés original para subir la ficha a un blog en donde yo solía colaborar y del cual me echaron). El segundo filme Les Vacances de Monsieur Hulot de 1953 (primera película en la que el personaje recibe ese nombre) es una innovación que el cine francés utiliza a habitantes de un pueblo como actores no profesionales, modalidad iniciada un par de años antes por el neorrealismo del cine italiano. En Mon Oncle de 1958 se usa por primera vez el sonido estereofónico en dos canales. Playtime (1967) fue rodada en 70 mm técnica usada casi exclusivamente por las grandes superproducciones hollywoodenses (Cleopatra, Ben Hur) en las que el tamaño de la película fotográfica era algo así como 4 cinemascopes sumados y que se proyectaban en salas especiales (en Montevideo solamente tres salas tenían pantallas y proyectores adecuados; las primeras 15 filas de butacas no se vendían porque era imposible apreciar esa inmensidad de proyección). Por último, en 1971 Trafic fue una de las primeras películas en experimentar el Dolby estéreo en 4 canales (todavía no se había inventado el 5.1).
Playtime es considerada por los más grandes críticos de cine del mundo como una de las 20 mejores películas de la historia (ubicada en cercanía a El Ciudadano de Orson Welles), y hasta el momento luego de más 50 años de realizada es la producción más cara del cine francés. Y es también la razón por la cual Jacques Tati dio quiebra y quedó en la ruina perdiendo hasta su casa. Como no conseguía inversionistas él mismo la produjo y se quedó sin nada, casi en la calle. Porque era un tipo muy terco, no se crea que esa película fue filmada en París. Tati construyó una ciudad a escala en estudios y todos los edificios de acero y cristal, calles, tráfico y transeúntes fueron extras muy bien pagados por la extenuante coreografía física que debían ensayar decenas de veces; en los propios créditos iniciales figuran dos destacados arquitectos franceses en el diseño de esos gigantescos decorados; hay que tener en cuenta que en aquella época no existían los efectos especiales por computadora. Pero, además, se emperró con que su película no podía ser exhibida en salas normales, exigió que fuera exhibida en salas de 70 mm, que eran muy pocas y aunque la respuesta del público fue masiva no alcanzaban la cantidad de butacas para financiar los costos.
Por último cabe mencionar, de entre cientos, un par de chistes que fueron antológicos que requieren de una atención especial.
1) En Mon Oncle la residencia de los Arpel, un modelo exasperante y ridículo de la tecnología, la modernidad y la estética, tiene en el jardín un sendero que comunica la puerta de entrada con el portón de la calle, que tiene forma de “S”. Hay una escena en que una señora va de visita y mientras entra con las manos extendidas en señal de saludo hacia la dueña de casa, esta última hace lo mismo saliendo de su vivienda, también con los brazos extendidos. Ambas dicen cumplidos y saludos en voz alta, pero téngase en cuenta la forma del sendero lo que hace que ambas vayan al encuentro mutuo pero en direcciones opuestas sin siquiera mirarse. Luego de escrito esto me doy cuenta de que es casi imposible describirlo. Quien vea Mon Oncle lo disfrutará y entenderá rápidamente.
2) La siguiente anécdota sólo fue posible apreciarla en el cine, en proyección gigante de 70mm pero en las versiones DVD no es perceptible. Playtime arranca con los créditos artísticos y técnicos sobre el fondo de un hermoso cielo azul, cuando estas leyendas terminan la cámara comienza a hacer una panorámica a la derecha y se puede observar un enorme rascacielos con grandes ventanales filmado en picada desde el piso hacia arriba. Lentamente comienza un acercamiento con zoom hacia los pisos superiores y en el penúltimo piso se observa que adentro de ese edificio van volando dos gaviotas o dos palomas que se ven a través del vidrio de los ventanales, mientras continúa el acercamiento la cámara se desplaza en dirección hacia donde vuelan suavemente las aves; viene un corte y la cámara ya ubicada adentro del edificio en el piso en cuestión muestra un gran pasillo por el que van caminando dos monjas benedictinas con esas enormes cofias blancas puntiagudas que se balancean de abajo hacia arriba en sus cabezas cubiertas por el hábito negro como si fueran alas de pájaro y que en la toma anterior parecían aves volando; el desplazamiento de esas religiosas y otras pequeñas cosas que van sucediendo ahí adentro te muestran que se trata de un enorme hospital hasta que en determinado momento te das cuenta que las pistas que seguiste eran falsas... ya ni siquiera es un hospital. Pero no vale seguir contando porque ya sería un enorme spoiler para quien vaya a ver esta película por primera vez.
La filmografía completa es Jour de Fête (1949), Les Vacances de M. Hulott (1953), Mon Oncle (1958), Playtime (1968) y Trafic (1971). Existe una última obra, un especial espantoso que grabó para la televisión sueca que por respeto al artista no menciono, y se trató de un trabajo que se vio obligado a hacer para... comer. ()
En mi modesta opinión, para quien no conozca la obra de Jacques Tati el orden adecuado para ver y apreciar sus películas sería no cronológico: 1) Mon Oncle – 2) Trafic – 3) Playtime – 4) Les Vacances de Mr. Hulot – 5) Jour de Fête.
() Estas reflexiones las escribí hace un tiempo y no quise editarlas, pero unos meses después yo tuve una nueva apreciación de Parade (la que más arriba me negué a mencionar porque al principio me había parecido espantosa) que expongo en la crítica de ese último filme aquí mismo en Moviehaku.
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