Bruno es amenazado cuando se dispone a denunciar la violación: Alba y él deben volver a Madrid, o su familia sufrirá las consecuencias. Bruno decide callar mientras la teniente Giner, que lleva el caso de Alba, anuncia que fue una violación múltiple. Mientras tanto, los cuatro chicos que se sobrepasaron con Alba en el bar y que son los principales sospechosos, sufren un extraño accidente. El hermano de Alba se encuentra mejor tras su infarto y Tirso ha limpiado las pintadas del bar familiar… Con el fin de calmar las aguas, Alba y Bruno deciden volverse a Madrid.
Alba, en shock, tras examinar el video recibido anónimamente, se marcha decidida a denunciarlo, pero Bruno que advierte sus intenciones, intenta impedirlo, asegurándole que las consecuencias pueden ser fatales para ella y el resto de su familia. Un todo terreno intenta atropellarla y Alba comprende que la amenaza es cierta. Bruno le recuerda los cuatro sospechosos muertos y le aconseja seguir juntos, aunque de puertas para adentro, la ruptura es total.
La teniente Giner revisa el lugar donde cayeron al mar los cuatro chicos sospechosos de violar a Alba, pero hay algo que no le encaja. Alba comparte confidencias con Tirso y da plantón a Bruno en una merienda familiar a la que decide no asistir. Giner reitera sus preguntas a una Alba que evitar dar detalles y le advierte que el caso se cerrará si no hay más pruebas. Rubén está inquieto e intenta asegurarse la lealtad de Hugo, frente a su primo Jacobo. Alba y Bruno revisan las cajas de la mudanza de Madrid y ella va tirando a la basura todos los recuerdos que les vinculan, sin contemplaciones. Exige a Bruno que planifique algo para salir de este infierno.
Bruno intenta sonsacar a su tía los detalles de su caída, pero Clara evita confrontar lo averiguado y desvía su atención. Bruno decide sincerarse con Cesar e informarle de las amenazas sufridas y el agente, promete ayudarle. Mercedes organiza una comida familiar para celebrar el compromiso de Sandra y su hijo Rubén. Aprovecha para recomendarle que se centre y recordarle la ambición de su primo Jacobo como acicate. Giner interroga a Cesar, que fue quien localizó a los cuatro sospechosos muertos y el que custodió las muestras seminales desaparecidas.
Alba se traslada a casa de su hermano, muy a pesar de su cuñada Miriam. La prensa se hace eco de la detención de los Entrerríos y Eloy les salva como puede de los periodistas. Alba comienza a ser acosada por grandes bufetes que la tratan como mercancía, pero no se deja manejar. Los Entrerríos asumen su nueva realidad, pero no bajan la cabeza y planean desacreditar a Alba como sea. No se puede decir lo mismo de Hugo, quien parece que no levanta cabeza… Mientras Alba esquiva a la prensa, Miriam les cuenta todo lo que puede, incluso que Alba y Bruno eran pareja. Eloy intenta controlar a Bruno, pero este está cada vez más rabioso, Alba por su parte se prepara para el posible juicio con Marta, pero la prensa y los rumores le pasan factura.
Se anuncia ya el inminente juicio por el caso de Alba y todos se preparan para ello. Mercedes visita al juez instructor para pedir explicaciones por procesar a los Entrerríos, pero acaba descubriendo que no es más que la cabeza de turco de una trama de corrupción que esconde la familia Entrerríos… Son días duros para Alba, que recuerda el inicio de su relación con Bruno... Marta se vuelca en preparar la chica para el duro proceso y barajan el acuerdo propuesto por Eloy.
Llega el día del juicio y Eloy expone la defensa de los acusados. Los Enterríos se van confiados mientras Tirso acompaña a Alba en todo momento. La jueza pide 20 años de prisión para los acusados y 10 más para Bruno. Por otro lado, la investigación sigue y Giner enseña a Marta el vídeo que ha descubierto la policía, la prueba de que Bruno no participó. El militar, que ya vive la tensión tras revelar a Rubén lo que siente por él, se encuentra en un momento frágil. Marta le insta a que diga lo que sabe y el militar decide ir a contárselo a Alba en persona: Bruno no la violó.
Alba y Bego no pueden creer que Hugo haya mentido. Llega el turno de Jacobo y Rubén, quienes declaran que Alba actuó de manera proactiva. Marta proporciona una prueba con la que no contaban los Entrerríos y buscan incapacitar a Rubén para invalidar sus actos. Pero la abogada no es la única con un as bajo la manga, ya que Eloy saca a relucir un dato de Alba que Marta desconoce. El juicio prosigue y la cosa está reñida, pero la opinión pública está con Alba. Marta no cree que sea la primera violación en grupo que cometen y hablan con Giner para buscar otra víctima que pueda declarar. Llega el momento de visionar la violación en el Tribunal. Por otro lado, se encuentran dos denuncias que se retiraron poco después y Alba, Bego y Marta buscan contactar con las denunciantes. Hablando con Tirso sobre el caso de Alba, Bego le explica lo fácil que sería todo si el ‘camello’ de los Entrerríos hablase.
Puerta es el contacto de César en la guardia civil, y le informa de que Tirso ha ido a declarar que vendió droga a los Entrerríos y Giner está al tanto. Eloy se ve confiado, pero este nuevo giro hace que el juicio pase a sentencia y Alba retire los cargos contra Bruno. Ante los imprevistos, el abogado desvela a Mercedes la prueba que había prevista para el juicio, en la que se acusa a Mariano de depravado sexual. La matriarca de los Entrerríos se ve doblemente engañada, ya que también el juez Manuel le admite que nunca pudo hacer nada por Rubén, simplemente le gustaba tenerla a su merced. Llega el día de la sentencia y los chicos son declarados culpables. Mientras tanto, Mercedes no se queda de brazos cruzados y decide llamar a los medios para hacer una declaración que hará tambalear la justicia.
Alba y Bruno recuperan su relación a escondidas mientras Tirso, cada vez más cercano a Bego, le confiesa que no es la primera vez que le vende este tipo de droga a los Entrerríos. Tras la sentencia, Mercedes cree poder anular el juicio desvelando su relación con el juez Manuel Cruz. Pero cuando Rubén va a contarle la posible solución a Hugo, es demasiado tarde y el militar se suicida ante su amigo. Tras el entierro, el juicio se declara nulo y los Entrerríos tendrán tiempo para preparar el próximo. Aun así, Mercedes prefiere cortar por lo sano y le ofrece un trato a Alba. Cuando Alba finalmente rechaza la oferta, quedan pocas esperanzas para los Entrerríos...
Alba lee la carta que Hugo dejó, en la que admite que la violaron y no solo a ella. Mientras tanto, Mercedes está en el hospital recuperándose de su caída y sigue empeñada en que Rubén se libre de su condena. Presiona tanto a Alba como a Eloy, pero ninguno parece dispuesto a ceder ante la matriarca. Los escándalos de los Entrerríos no hacen más que salir a la luz, y Toño averigua que Miriam aceptó dinero de la familia a cambio de una prueba contra los violadores. Por otro lado, Rubén no se fía de Bruno, mientras que Jacobo se muestra tranquilo. Pero Bego ha encontrado algo que puede hacer tambalear el futuro de los jóvenes: un chat en el que hablan de sus ‘hazañas’. Marta ha conseguido contactar con dos de las víctimas que retiraron la denuncia a los Entrerríos y pone en guardia a Alba para no meter la pata, pero ella ya ha entrado al chat. César decide dejar de trabajar para Eloy y confiesa a Clara todo lo que ha hecho en contra de Bruno.
Se confirma que la carta que confiesa la violación de Alba fue escrita por Hugo. Alba tendrá que declarar de nuevo, pero entre tanto, logra contactar con Jacobo a través del chat en el que se hace pasar por un seguidor del Entrerríos. Aunque sufre con cada palabra que teclea, consigue sacarle información a su agresor: colecciona la ropa interior de sus víctimas… y Alba piensa demostrarlo. Pero cuando la chica ve a su hermano roto por descubrir que Luisito no es su hijo y que Miriam ha engañado a todos pactando con los Entrerríos, cambia de objetivo. Cree que Mercedes ha querido herir a su familia y eso no piensa permitirlo. Bruno intenta disuadirla y le pide que se centren en demostrar la violación. Mientras tanto, Rubén anda descontrolado y obsesionado por Alba, tanto que la rapta para acabar con la que considera la culpable de todo.
S01E01 28/03/2021
Capítulo 1
VotarEl curso ha terminado y el verano ya se puede oler en la ciudad. Alba y Bruno dejan su piso de Madrid para pasar las vacaciones en su pueblo, y con la intención de contarles por fin a sus amigos y familia que están juntos. El primero en saberlo será Tirso, el rollo de Alba de toda la vida. Esa misma noche, la pareja se verá en el pub del pueblo con todos sus amigos. Pero los cachorros de la influyente familia Entrerríos tienen otros planes de fiesta para su amigo Bruno... A la mañana siguiente, Alba despierta en la playa, dolorida y con la ropa rasgada…