Antes de que Lucifer empiece su nuevo trabajo, él y Chloe disfrutan de una noche de magia que acaba en asesinato. Linda y Amenadiel invitan a Maze y Eva a cenar.

Lucifer, desesperado por ayudar, le echa una mano a Carol con la investigación de la muerte de una drag queen. Ella y Chloe indagan en el misterioso pasado de Carol.

Un Lucifer y una Chloe especialmente animados se ven atrapados en un círculo infernal. Amenadiel se prepara para su nuevo trabajo. Dan vuelve a la ciudad de los ángeles.

Lucifer reconecta con algunas de sus ex con la esperanza de confirmar que Rory está equivocada. Dan trata de encontrar a alguien (da igual quién) que pueda verlo.

Lucifer, que no se cree capaz de haber abandonado a su futura hija, se propone demostrar una teoría alternativa: la única explicación es que fuese asesinado.

Amenadiel, ansioso por hacerlo bien en su primer día de trabajo, se cruza con un inspector racista de su pasado. Además, Lucifer trata de estrechar lazos con Rory.

Aparece el ex de Eva, Adán (sí, ese Adán), con la esperanza de reconciliarse... precisamente el día de la boda de Eva y Maze. Luego, Ella tiene una noticia preocupante.

Lucifer dice que por fin está listo para ser Dios, pero parece que sus alas no lo tienen tan claro. Linda comparte a regañadientes el primer borrador de su libro.

Lucifer trata de disfrutar del que podría ser su último día en la Tierra, el asesino de Dan se fuga de la cárcel y Chloe sorprende con un notición.

Desesperados por rescatar a Rory, Lucifer y Chloe se enfrentan a su secuestrador armados con pistolas... y alas. Lucifer acaba por aceptar su destino.