El equipo de Eppes está muy decepcionado tras descubrir que Colby espiaba al FBI para pasar datos de expedientes al Gobierno Chino. Pero confían que tenga una buena explicación, especialmente Don, que considera que la confesión de Colby estaba preparada.

Una misteriosa cinta llega al equipo de Eppes, en ella están grabadas las imágenes de una chica muerta. El suceso tuvo lugar en una lujosa mansión de un actor de Hollywood. La chica murió en la bañera asfixiada. Pero lo más curioso es que la joven tiene una hermana gemela, lo que complicará las investigaciones.

Un coche que circulaba a gran velocidad choca contra una concurrida cafetería. El equipo, investigando el accidente, descubre que podría no tratarse de un choque fortuito, sino de algo premeditado. De esta manera, tendrán que concentrar sus esfuerzos en averiguar los motivos y la identidad del conductor.

Charlie, Don y el resto del equipo investigan e intentan detener a un presunto asesino en serie obsesionado con las figuras bíblicas, ya que sus crímenes parecen estar relacionados con la Biblia.

Dos ladrones roban en un banco privado donde hay numerosas cajas fuertes que se abren con huella dactilar. La entidad financiera tiene una política de confidencialidad similar a las cuentas que hay en las Islas Caimán. El caso es complicado de resolver porque los dueños no colaboran demasiado, ya que lo que guardan en las arcas es de origen comprometido. Pero lo más curioso es que el botín obtenido del robo es donado a organizaciones benéficas.

Una mujer que estaba protegida por el programa de Seguridad de Testigos es asesinada y su hijo adolescente herido. La joven había declarado contra un grupo de mafiosos en Alburquerque y el programa le había trasladado a Los Ángeles hace cinco años. Don la conocía y había quedado el mismo día con ella, por lo que se siente culpable de su muerte. Por otro lado, Charlie presenta su libro sobre Matemáticas, aunque de momento no tiene demasiado éxito en cuanto al número de ejemplares vendidos.

Un hombre cae al vacío desde una azotea de un edificio de la ciudad de Los Ángeles. El sujeto trabajaba como ayudante del fiscal del distrito de Kansas. Pero, además, participaba en un juego de rol a cuyo ganador le otorgaban un premio de un millón de dólares. Los miembros del equipo de Don, con ayuda de Amita y Charlie, tendrán que hacerse pasar por jugadores de rol para atrapar al asesino.

El equipo de Eppes tiene que investigar el secuestro de una rica heredera que se produce en uno de los clubs más populares de la ciudad. La joven es adorada por todos y era la protagonista de todas las fiestas, pero no tenía guardaespaldas.En el marco personal, Don sigue dudando sobre sus verdaderos sentimientos hacia Liz. La joven, por su parte, quiere hablar con él, pero Don se muestra reticente a aclarar la situación.

El robo con violencia de un ejemplar único de un cómic se convierte en el nuevo caso del equipo de Eppes. Horas después de la desaparición de la historieta, varios cómics aparecen con el objetivo de disuadir a los agentes del robo. Al mismo tiempo, Don se muestra distante con sus compañeros de trabajo tras su ruptura con Liz. Colby está buscando novia y Sara se ofrece a ayudarlo.

Un hombre dispara a un policía en la comisaría del equipo de Eppes. Tras herir al agente, intenta usar a una mujer como rehén, pero David le convence para que la suelte. En su intento de seguir con la matanza el hombre entra en el ascensor, pero David también permanece dentro. El sujeto, que trabajaba de vigilante por encargo del FBI, está obsesionado con la idea de que le vigilan, algo que no está tan lejos de la realidad. La agente Liz ha decidido trasladarse al departamento de Narcóticos tras finalizar su relación sentimental con Don.

El equipo de Eppes trabaja en el caso de la desaparición de una periodista de investigación. La joven estaba tras la pista de un caso de corrupción urbanística. El caso es muy complicado ya que la policía ha desaparecido sin dejar rastro, excepto varias hojas llenas de números. Al mismo tiempo el hermano de Don, Charlie, es perseguido en la carretera por una camioneta. Los agentes sospechan que esta persecución tiene que ver con el caso de la reportera que se encuentra en paradero desconocido.

El equipo de Eppes investiga varias violaciones llevadas a cabo por un policía. El violador ayudaba a las chicas cuando tenían algún problema con su coche y se ofrecía a llevarlas a su casa. Una vez allí, el agente abusaba de ellas. Por su parte, Amita se traslada varios días a casa de Charlie porque van a fumigar su edificio. Ambos compartirán el hogar con Allan, el padre de Don y Charlie, y con Larry, quien ha cedido su habitación del monasterio a unos monjes tibetanos. Esta situación le servirá a la pareja como experimento de una futura situación real de convivencia.

El agente Don Eppes y el resto de sus compañeros participan en una operación en un laboratorio de metanfetaminas. Justo cuando acaba la redada, un joven aparece en la zona, pero se marcha corriendo. Los policías lo detienen y revisan su vehículo, que estaba lleno de armas y otros materiales ilegales. Esta situación pone a los agentes tras la pista de un grupo que se dedica a la fabricación de explosivos.

Don y su equipo investigan la muerte de dos testigos que tenían que declarar en el mismo caso. El juicio en cuestión era contra una banda organizada de Los Ángeles. Cuando un tercer testigo desaparece misteriosamente, los agentes deberán encontrarlo antes de que lo hagan los mafiosos. Por su parte, Charlie realiza un cursillo de entrenamiento del FBI para aprender a actuar en situaciones límite. Sin embargo, parece ser que al pequeño de los Eppes se le dan mejor los números.

El asalto a una casa se salda con el secuestro de un padre y su hija mayor de 20 años. La joven, que durante la invasión ha permanecido oculta en una trampilla, es el único testigo de la desaparición. Según aclara la joven, los raptores pertenecían al cuerpo de marines, al igual que su hermano mayor. Este último también se encuentra en paradero desconocido. Por otro lado, la nueva novia de Don está celosa por la buena relación entre el agente Eppes y su ex novia Liz.

Don y su equipo tendrán que investigar a una secta religiosa, tras morir envenenados muchos de sus seguidores.

Una estrella de rap es tiroteada a la salida de una fiesta. El joven era la estrella de la discográfica Center Mass Records. El cantante tenía problemas con su amigo Derek por la composición de los temas. El equipo de Eppes cree que Derek tiene algo que ver con el crimen pero, tras un ataque en su casa mientras es interrogado, se dan cuenta de que pueden estar equivocados. Por otro lado, los policías sienten la falta de Megan, quien ha pedido una semana de vacaciones. La relación entre Charlie y Amita da un nuevo paso, ya que los padres de la joven han venido a conocer al novio de su hija.

El equipo de Eppes investiga el secuestro de varios hombres. Los sujetos tenían en común su pertenecía al Fondo Internacional de Pakistán (FIP), una organización no gubernamental que financia diferentes proyectos en Pakistán y Bangladesh. Los policías piensan que se trata de una célula de la Yihad. Charlie está muy afectado con el caso, ya que uno de los presuntos miembros es investigador y amigo suyo. Por otro lado, la agente Megan lleva un tiempo dudando si seguir con su brillante carrera en el FBI o dar a su vida un giro y terminar su doctorado.