Javi, Álvaro y Zeta están en el Más Allá, un lugar sin recuerdos de su vida anterior. En el mundo de los vivos, Olivia descubre que otros No Muertos han aparecido en Almanzora y busca la manera de lograr que la pandilla regrese para poder detenerlos.

A la pandilla se le suma otro miembro: Anabel, una fantasma amiga de la Mortaja. Olivia convence a Costa de que reabra la investigación sobre un nuevo ritual.

Anabel enseña a la pandilla a desarrollar sus poderes para interactuar con el mundo físico. Evelyn, la lideresa de las Novavis, se encuentra con la oposición del Marqués a su plan, lo que despierta su interés por Javi.

La pandilla se da cuenta de que los No Muertos pretenden separarlos para atrapar a Javi y acaban cayendo en la trampa. Costa, tras forzar un registro policial en el hotel sin obtener resultados, queda en entredicho ante su padre y Mario.

La pandilla tiene que acudir al rescate de Javi en el hotel, víctima de la lucha entre Evelyn y el Marqués, mientras que las vidas de Sandra, Olivia y Bea penden de un hilo.

La pandilla queda descabezada. La cabina ha desaparecido y no hay manera de acceder al Abismo. Solo cuando Quino advierte que se ha producido una brecha temporal, a Olivia se le ocurre comunicarse con su abuela en el pasado.

Javi empieza una carrera contrarreloj en la que tendrá que ganar aliados y evitar a viejos enemigos.

Con Javi y Zeta atrapados, Bea y Olivia deben liderar una misión de rescate con final incierto.