A medida que Tariq St. Patrick comienza su nueva vida en la Universidad de Stansfield, se debate entre dos mundos: hacer lo que dijo su madre, vivir su vida como un chico universitario normal o hacer lo que ella le enseñó, hacer prisa.

Tariq St. Patrick se ajusta a los cambios que fueron provocados por un cambio dramático en la forma en que funciona su mundo, que incluye la muerte de su padre y su madre enfrentando cargos de asesinato por un crimen del que su hijo era responsable.

Tariq lucha con el peso de proporcionar la creciente defensa legal de su madre mientras hace malabarismos con los rigores de la vida de la Ivy League.

Después de que Monet acordó hacer negocios con él, Tariq inicia su juego para controlar el mercado de las drogas en el campus, mientras aísla su participación y la de Monet.

Es el 18 cumpleaños de Tariq, pero no hay motivo de celebración ni de tiempo. Saxe le trae noticias que podrían hacer estallar el caso de Tasha. A Tariq le preocupa que la relación en ciernes de Brayden pueda poner en peligro su negocio.

Las manos de Tariq están atadas, le preocupa que contarle su trato con los Tejada a Brayden lo haya puesto en peligro con Cane, que le demuestra el precio a pagar por usar su nombre.

A medida que se calienta el ambiente en el campus, Tariq no quiere que Lauren pase de él. ¿O la que le mola es Diana?

Tariq no puede evitar sentirse desplazado rodeado de todos los padres que han inundado el campus por la jornada de puertas abiertas de Stansfield.

Tras el choque de ambos mundos de Tariq en las jornadas de puertas abiertas, la policía campa por el campus, lo que le dificulta las cosas para saldar sus deudas.

Tariq hará lo necesario para absolver a su madre. Pero al tener deudas con Monet, Tariq está entre la espada y la pared al intentar cumplir su promesa de sacar a Tasha de la cárcel.