Simón se enfrenta a una devastadora noticia: su padre ha muerto en un atentado terrorista en Bogotá. Al otro lado de la ciudad, Valentina es responsable de su hogar a pesar de no sentirse del todo bien en su cuerpo de niña de trece años.

En el colegio, Simón conoce a Gabo e inicia una amistad con él. Sin quererlo, se termina comprometiendo a participar en el show de talentos de la escuela. Pero tanto la banda de Valentina como la de Simón son rechazadas en las audiciones.

Vale le presta un cassette de rock a Simón que él pasa en la emisora. Ella aprecia el gesto y lo invita a formar parte de su banda. El anuncio de la muerte de Pablo Escobar es el detonante de una pelea que acaba con Simón chocando un auto.

Vale es desafiada a componer algo, pero los otros miembros de la banda la abuchean porque la composición es demasiado mala. Para salvar el día, Simon lee una letra que ha escrito Valentina, pero ella se enfada y se va dando un portazo.

Simón invita a Vale a comprar discos, pero la tienda está cerrada. Vale decide ir al club y en la piscina, ella y Simón están a punto de besarse. Pero la idílica tarde termina cuando descubren que la abuela de Vale se ha perdido

Después de intentar incendiar su antigua casa, Simón decide secuestrar a Valentina y trata de convencerla de que no viaje con la excusa de grabar una canción. Los Rotos terminan provocando un incendio que sanará las heridas del pasado.