Carrie tiene una especie de crisis de identidad después de que la propongan participar en un espectáculo caritativo en el que tomarán parte gente real y modelos. Por el contrario Samantha que representa el otro lado del asunto, no tiene ningún vergüenza en mostrar su cuerpo y planea, incluso, hacerse fotos desnuda. Por otro lado, Charlotte descubre que tiene “vulvodonia” y que se va a ver obligada a tomar antidepresivos no para su cabeza, sino como remedio para sus dolores vaginales.
Carrie y Mr Big, que ahora son amigos, comienzan a salir de copas juntos. En una de sus escapadas, Carrie conoce a un hombre. Es el dueño de un club de jazz. Tras charlar un rato, Carrie accede a darle su número de teléfono. Por otro lado, Miranda, que se queda de piedra cuando su novio hace sus necesidades “menores” delante de ella, decide hacer lo mismo para observar su reacción. Sin embargo, al final las cosas no salen como ella había previsto ya que éste reacciona con indiferencia ante la provocación.
Todo el mundo, excepto Miranda, está teniendo relaciones sexuales. Ella no quiere ni oír hablar del tema. Harta de ya malas citas se ha decantado por comer chocolate. Al final, no puede resistirse y opta por solucionar sus carencias de manera personal.
Steve invita a Miranda a la inauguración de su nuevo bar. Cuando eran novios, ella fue la única que le animó a ser ambicioso y a no renunciar jamás a sus sueños. Sin embargo, dado que la relación terminó hace tiempo, no sabe si debe acudir. Mientras tanto, Samantha decide hablar con María, está cansada de tanta monotonía y quiere un poquito más de pasión en la relación.
Carrie está atormentada porque no puede parar de pensar en Aidan. Posteriormente, confesará a sus amigas que quiere volver con él. Miranda cree que la mejor manera de retomar la relación es a través del e-mail y Carrie acepta. Le mandan un e-mail en el que le dice lo mucho que le echa de menos. Después de treinta y seis horas, Carrie todavía no ha recibido ninguna contestación. Al final, no puede aguantarse más y opta por llamarle.
Aidan y Carrie escuchan, mientras están en la cama, un mensaje de Big en el contestador. La situación a partir de este momento se enturbia considerablemente, a pesar de los constantes esfuerzos de Carrie por parecer una buena novia. Charlotte deja a sus amigos muy sorprendidas cuando les anuncia que quiere dejar su trabajo en la galería de arte para centrarse en si misma y tener un niño.
Carrie, Samantha, Charlotte y Miranda quedan para comer y contarse sus cosas. Carrie les revela que ella y Aidan se han intercambiado las llaves de sus apartamentos. Cuando Carrie llega a casa se encuentra con Aidan cocinando en la cocina, y descubre que su ordenador está estropeado. Miranda tiene que ir a Filadelfia porque su madre ha sufrido un ataque al corazón. Al día siguiente, la madre de Miranda muere.
Miranda se entera de que Steve tiene un cáncer de testículos. Ella queda a comer con Steve y le dice a gritos que está demasiado tranquilo por lo del cáncer. Steve se viene a bajo y se pone a llorar. Carrie prepara un viaje a una cabaña en el pueblo de Aidan. Nada más llegar a la casita rural, Carrie lamenta no estar en la ciudad. Incapaz de permanecer allí más tiempo, vuelve a Nueva York. Una vez en la ciudad, queda con Big y éste le cuenta que está saliendo con una actriz de la que cree estar enamorado. Es entonces cuando Carrie decide volver con Aidan pero, antes, recluta a Samantha para asegurarse la diversión.
Steve se siente menos varonil con un solo testículo. La hombría de Trey también se pone en duda cuando Charlotte le dice que necesita un examen de su esperma porque no ha conseguido quedarse embarazada todavía. Big está deprimido porque su nueva novia, la estrella del cine, está jugando con él, decide llamar a Carrie para consolarse y Aidan se enfada. Steve está pensando en hacerse un implante de testículo y habla con Miranda para visitar un especialista. Ella llega a la conclusión de que lo que Steve necesita es una mujer que quiera tener sexo con el. Así que decide dormir con él.
Miranda le cuenta a Carrie que se ha quedado embarazada por tener sexo sin protección con Steve. Miranda no quiere tener el bebé, pero tampoco quiere contárselo a Steve. Charlotte, mientras, no parece que pueda quedarse en estado. Cuando descubre que Miranda está esperando un hijo y que está pensando abortar, se enfada y le da mucha rabia. Hablando del tema, Carrie y Samantha admiten que las dos tuvieron abortos. Todo esto hará que se revivan muchos recuerdos.
Carrie le cuenta a Aidan que van a vender su edificio. Aidan le recomienda que compre su piso ya le dice que él comprará la vivienda de al lado para tener una casa más grande. Carrie les cuenta a las chicas que sospecha que Aidan le va a pedir matrimonio porque se ha encontrado, por casualidad, un anillo de compromiso muy feo. Carrie piensa rechazar la proposición de matrimonio pero aceptará que vivan juntos. Mientras, Miranda le cuenta a Steve que está embarazada y le hace saber que ella se responsabilizará del bebé sin contar con su ayuda. Por otro lado, Charlotte se apunta a una lista de espera de fecundación in vitro. Al final del capítulo, Carrie entra en casa y al ver que Aidan se arrodilla y le propone matrimonio con un nuevo anillo, ella acepta su proposición.
Aidan traslada todas sus cosas al apartamento de Carrie, esto provoca que ella sienta cada vez más claustrofobia. Carrie se queja de que las chicas no tienen un espacio privado, ella no se puede comportar como un soltera en secreto. Carrie, Miranda y Charlotte toman el pelo a Samantha sobre su relación con su cliente y amante Richard.
Es sábado por la noche y Carrie quiere salir a dar una vuelta por la ciudad pero a Aidan no le apetece. Carrie decide llamar a las chicas para salir a bailar a un club de gays. Charlotte se choca con Anthony y su amigo que trabajan en la revista Casa y Jardín. Carrie conoce a un gay muy guapo llamado Oliver y, Miranda se encuentra con Max, un socio de su firma. Cuando Carrie vuelve a casa está preparada para la acción pero Aidan quiere dormir. Samantha, que ha tomado algo de éxtasis en el club, hace el amor con Richard y termina declarando su amor él.
Carrie se siente presionada por Aidan, y la sociedad en general, para planear su boda y le cuenta a Miranda que no se siente como una novia ruborizada. Miranda confiesa que ella tampoco se sintió así cuando se enteró de su embarazo y le cuenta a Carrie que "fingió", aparentando estar feliz cuando descubrió que iba a tener un niño. Miranda convence a Carrie para ir a probarse algún vestido de novia. Probándose el vestido, Carrie empieza a sentir pánico y Miranda rasga su vestido. Ya en la cafetería, Carrie se pregunta por qué hay que casarse cuando todo está bien como está.
Incapaz de decir adios, Carrie vuelve cuando Aidan recoge sus cosas y se va del apartamento y de su vida. Ella encuentra una carta de despedida, un documento legal que le da 30 días para volver a comprar su apartamento o desocuparlo. En el banco, le dicen que ella no es una candidata aconsejable para recibir un préstamo.
Carrie vuelve al estilo de su primer artículo para Vogue. Su nuevo editor, Enid, le dice que quiere que no se refleje tanto en lo que escribe. Miranda, por su parte, se plantea cómo va a compatibilizar el estrés del trabajo y la maternidad. Charlotte se ofrece a ayudarla y esta acepta. Al final, Carrie vuelve a escribir el artículo y pasa la prueba de Vogue.
Es otoño en Nueva York y Carrie anhela tener algo de compañía. Se auto invita al apartamento de Big porque busca un sitio para dejar sus cajas. Big se está mudando a Napa, en California y Carrie le intenta convencer para que acepte. Samantha se siente abandonada porque Richard llega tarde de su reunión y empieza a sospechar de sus excusas. Charlotte conoce a alguien muy especial en el Museo de Arte Moderno.
S04E01 03/06/2001
La agonía y el éxtasis
VotarLas chicas se preparan para la fiesta de compromiso (matrimonial) del próximo sábado por la noche, y se quedan de “piedra” cuando reciben una invitación que reza: “Dos cuerpos, un alma”. Mas tarde, en una discusión sobre la masturbación, Charlotte confiesa que en las últimas semanas sólo se había “satisfecho” pensando en Trey.